En el contexto del desarrollo de tecnologías de reproducción asistida, un enfoque ambientalmente amigable y seguro se vuelve cada vez más importante, especialmente cuando se trata de la gestación subrogada.
La gestación subrogada es una fuente de gran esperanza y alegría para muchos, incluyendo celebridades y familias ordinarias que buscan experimentar la alegría de la paternidad.
La progesterona juega un papel central en el proceso de FIV (Fertilización In Vitro), estrechamente ligado a las fases esenciales del ciclo menstrual natural de una mujer, que son críticas para el desarrollo y maduración del óvulo:
La inseminación intrauterina (IUI) representa un tratamiento avanzado de fertilidad destinado a ayudar a individuos y parejas que luchan con ciertas formas de infertilidad para lograr un embarazo. Este método contrasta con la fertilización in vitro (IVF), un proceso donde la fertilización del óvulo ocurre externamente, en un ambiente de laboratorio controlado.
